Duerme,duerme, dueño mío
sin zozobra,sin temor
aun que no se duerma mi alma,
aun que no descanse yo.
Duerme,duerme y en la noche
seas tu menos rumor
que la hoja de hierba,
que la seda del vellón.
Duerme en ti carne mía,
mi zozobra, mi temblor
en ti encierrense mis ojos:
¡Duerma en ti mi corazón!
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